Como tú vida mía, yo no encuentro en la tierra otra mujer, la he buscado en Namibia, en los Alpes y en los Champs-Elysées.
He cruzado los mares y de paso subí en la Torre Eiffel, caminé por Manhattan y llegué al Empire State.
Como tú no hay en esta vida, como tú no hay quien me comprenda, como tú no hay quien me acaricie, ni en la China ni en la Siberia.
Es que un amor como el tuyo es para siempre, vuela sobre manantiales y continentes.