Por Fernando Tuesta Soldevilla
Proclamar que no hay elecciones sin democracia es una afirmación errónea. En realidad, muchos gobiernos dictatoriales a lo largo de la historia han tenido que recurrir a las urnas para atender inquietudes sociales y así sobrellevar su autoritarismo, aplacar hostilidades o subvertir ánimos de inspiración democrática.
Tipo de documento: Artículo | Editorial: Oficina Nacional de Procesos Electorales - ONPE