Peter F. Drucker en el artículo “El ascenso de la sociedad del conocimiento” esboza la siguiente conclusión: “El conocimiento es hoy más esencial para la riqueza de las naciones, que el capital o la mano de obra”.
Llega a esa conclusión luego de hacer un análisis de lo ocurrido en el mundo occidental desde los inicios de la era industrial y el paso de todos sus procesos revolucionarios, hasta llegar al poscapitalismo, donde el conocimiento, específicamente el especializado, es decir, aquel capaz de convertirse en conocimiento aplicado, constituye la principal fuente riqueza en detrimento de la tierra y el capital, tal como lo sostenía la teoría clásica de la economía.
Sobre esa base, Peter F. Drucker hace varias afirmaciones que pueden resultar para muchos trasgresores de las ideas comúnmente aceptadas.
Por ejemplo, Drucker sostiene que la teoría económica del marxismo fue derrotada por el capitalismo, porque el proletariado —sus supuestos enemigos— también se benefició de los cambios técnicos ocurridos en las formas de producción (de la artesanal a la industrial).
Estos cambios en los procesos productivos, acarreó una serie de mejoras, tanto en las organizaciones como en los trabajadores, tales como los procesos productivos, la productividad de los trabajadores y sobre todo, la conversión de los obreros en burgueses, por el aumento de sus ingresos y de su calidad de vida. Todo ello lo resume en una frase: “La revolución de la productividad”.
Drucker sostiene en su artículo «El ascenso de la sociedad del conocimiento», que todos estos cambios ocurridos en la esfera de la economía y de las industrias, también tiene implicancias en la sociedad, en la cultura, en la política y en el tipo de ciudadano de la sociedad poscapitalista.
“El autor de 27 libros, Peter F. Drucker, ha sido un agudo observador de los profundos cambios ocurridos en el trabajo y en la sociedad durante el último medio siglo.
Su obra Practice of Management (La práctica de la administración) instauró en 1954 el estudio de la empresa y otras organizaciones como una disciplina académica, y le ganó el prestigio de ser el decano de la administración en los Estados Unidos.
En The Age of Discontinuit: Gudelines to Our Changing Society (La era de la discontinuidad: directrices para nuestra sociedad cambiante) de 1969 auguró el mundo posindustrial, y sus escritos vaticinan también la evolución de la economía global.
En este fragmento de su obra más reciente, Post-Capitalist Society (La sociedad poscapitalista) de 1993, Drucker centra su atención en otro cambio que se está produciendo en todo el mundo; el surgimiento de la sociedad del conocimiento, a lo cual califica como “el cambio de mayor magnitud que se haya registrado jamás en la historia del intelecto”.
El ascenso de la sociedad del conocimiento se refiere al proceso en el que la información y el conocimiento se convierten en los principales recursos para el desarrollo y el progreso de una sociedad. Este término fue acuñado para describir la transición de una economía basada en la producción de bienes materiales a una economía basada en la producción y distribución de conocimiento.
En la sociedad del conocimiento, el acceso a la información y la capacidad de procesar y utilizar ese conocimiento se vuelven fundamentales para el éxito y la competitividad. La tecnología, especialmente Internet, ha desempeñado un papel crucial en el crecimiento de esta sociedad, al permitir un acceso rápido y global a la información.
Este cambio hacia la sociedad del conocimiento ha llevado a transformaciones significativas en varios aspectos de la vida moderna. En primer lugar, ha habido una creciente demanda de trabajadores altamente capacitados en campos relacionados con la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas. Las habilidades cognitivas, la creatividad y la capacidad de aprendizaje continuo son cada vez más valoradas en el mercado laboral.
Además, el conocimiento se ha convertido en una mercancía que puede generar beneficios económicos. Las empresas y las organizaciones invierten en investigación y desarrollo, generando nuevos productos y servicios basados en el conocimiento. La propiedad intelectual, como las patentes y los derechos de autor, se ha vuelto crucial para proteger y monetizar el conocimiento.
La sociedad del conocimiento también ha impulsado cambios en la forma en que se educa a las personas. Se enfatiza el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y el trabajo en equipo, en lugar de simplemente transmitir conocimientos. La educación se centra en la adquisición de habilidades y competencias que permitan a las personas adaptarse y prosperar en un entorno en constante evolución.
Sin embargo, el ascenso de la sociedad del conocimiento también ha planteado desafíos. Existe una brecha digital que limita el acceso a la información y al conocimiento en ciertas áreas y para ciertos grupos de la población. Además, el ritmo acelerado del cambio tecnológico puede generar desigualdades y exclusiones sociales.
En resumen, el ascenso de la sociedad del conocimiento es un proceso en el que la información y el conocimiento se convierten en los principales motores del desarrollo y el progreso. Este cambio ha tenido un impacto significativo en la economía, el empleo, la educación y la forma en que las personas acceden y utilizan la información. Sin embargo, también plantea desafíos en términos de acceso equitativo y adaptación a un entorno en constante cambio.
Tipo de documento: Artículo | Editorial: Revista Facetas